El técnico del Hércules, Gustavo Siviero, destaca la semana de entrenamientos realizada por sus jugadores y afirma que “ahora hay que limpiar la cabeza, competir y creer en nosotros”. “Detectados los problemas hay que hacer cosas diferentes para volver a ganar”, explicó.
El técnico del Hércules, Gustavo Siviero, destacó en la rueda de prensa previa al partido ante el Peralada la buena semana de entrenamientos de su equipo y el compromiso de sus jugadores: “Hemos hecho un trabajo bueno y de alta intensidad. Ahora hay que limpiar la cabeza, competir, creer que somos un buen equipo y que somos capaces de dar mucho más de lo que estamos dando para revertir la situación. El trabajo psicológico es importante. Cuando tienes todo a favor la sola dinámica te lleva. Hay que estar encima y creer en el trabajo que hacemos”.
Siviero reconoció que el grupo está “preocupado por la situación, pero ocupados en revertirla trabajando duro y fuerte”. “Intentamos encontrar la tecla para revertir la dinámica negativa que nos tiene en esta situación impropia de la categoría de este club”, afirmó.
El técnico argentino, otra jornada más, no buscó excusas en las múltiples lesiones que tiene de jugadores importantes (Nieto, Juli, Chechu) y aseguró que “echaremos mano de los recursos que tenemos para armar un equipo competitivo”. Además, el entrenamiento ha dejado la mala noticia de la lesión de Moha, duda para el partido del domingo por unas molestias en la rodilla. “Vamos a ver cómo esta mañana, no parece grave y actuaremos de acuerdo a las sensaciones del futbolista”, aclaró.
Gustavo Siviero destacó que el Peralada, a pesar de su inicio dubitativo, es ahora “un equipo sólido y solvente, que lleva tres partidos puntuando”. “El problema somos nosotros mismos, tenemos que solucionar los fallos y mejorar. Si estamos al nivel que sabemos dar, podemos competir con garantías contra cualquier rival”, insistió el preparador blanquiazul. Siviero comentó a los periodistas que se siente “fuerte y con ganas” para sacar al Hércules de la situación actual: “Solo pienso en el siguiente día y en el próximo partido. Sabemos la situación que es, pero no entro en la psicosis ni en el clima que existe sobre la figura del entrenador porque perdería mi fuerza y energía”. El entrenador del Hércules explicó que “detectado el problema, no podemos seguir haciendo las mismas cosas”. “Somos conscientes de lo que nos pasa y estamos concentrados en torcer la dinámica, aprender de los errores, para comenzar a ganar”, concluyó.