El técnico del promesas analiza la temporada del filial con la esperanza de seguir subiendo jugadores al primer equipo.

Periodista deportivo, apasionado del fútbol y enamorado del Hércules, Gaspar Campillo cumple un sueño al ser entrenador del equipo de su ciudad y con el objetivo de que sus jugadores sigan subiendo a jugar con el primer equipo.

Eres herculano de toda la vida, ¿qué sentiste cuando te llamaron desde el club para hacerte cargo del filial?

En un principio mucha ilusión, ya estuve entrenando al Jove Español cuando estaba colaborando con el Hércules y era su filial, pero no es lo mismo. Es trabajar con chicos muy jóvenes, toca adaptarse después de estar quince años haciéndolo con una combinación de jugadores más adultos y jóvenes, aquí trabajas con gente que tiene mucha hambre y defiendo un escudo y unos colores que son los de mi tierra.

Y a parte de entrenador también has estado como jugador en las categorías inferiores.

Desde benjamín hasta el filial, después ya me fui fuera. Toda mi vida deportiva ha sido en el Hércules. Fíjate, cuando tenía cinco años iba a la grada de Preferente cuando el Hércules estaba en primera a ver a Charles, Giulano y compañía, siempre me colaba en los entrenamientos para hacerme fotos con mis ídolos. Pues al final acabé entrenando con Charles, uno de mis jugadores favoritos.

Conocido periodista deportivo, ¿cómo llegas a ser entrenador?

Yo entré en el Jove Español con Antonio Alcaraz, llegamos del Sporting Plaza Argel de segunda regional y veíamos que se nos quedaba pequeño. Miramos con la directiva de buscar otro club, nos llegó una propuesta de San Vicente y nos fusionamos varios equipos, iniciando un proyecto que duró catorce años. Me fui al Elche como captador de jugadores porque no me convencía el proyecto que iniciaron ese año, no se apostó por la cantera y era algo que no me gustaba. A finales de ese año Carlos Heredero y José Segarra me llamaron para ver si podía ayudar, era la temporada 2010/2011 y el equipo estaba muy mal, a falta de doce partidos me pidieron que llevara el equipo. Gracias al esfuerzo de los chavales ganamos diez encuentros y en el último encuentro de liga nos salvamos. Al año siguiente fiché a Lledó, dimitió porque los jugadores que se habían firmado no entraban en su filosofía de fútbol y volví a coger las riendas del equipo otra vez.

Y luego llegó la colaboración entre Jove Español y Hércules. ¿Cómo fue?

Inicié yo la compaña porque quería probar seriamente como entrenador, firmando yo los jugadores que consideraba. Hicimos una muy buena primera vuelta, acabamos segundos. Pero tuvimos la baja de Soldevilla que se fue al Eldense, tuvimos cuatro jugadores que subieron al Hércules. No pudimos reforzarnos, hicimos una segunda vuelta muy mala y no llegamos al play-off.

Tienes que amar mucho a este club porque el proyecto que te ofrecen a principio de temporada es con un presupuesto ajustado.

Si, la verdad es que es un proyecto más para sacar jugadores para el primer equipo. Cuando leo y oigo cosas de ascenso me río porque verás, el presupuesto para los jugadores es cero, al igual que para el cuerpo técnico, incluido yo. Todos los que colaboran conmigo lo hacen gratis, y eso es algo que les agradeceré toda la vida, porque lo hacen por mi y por amor al Hércules. Y al empezar la temporada solo lo hicimos con dos jugadores del año pasado, tuvimos que hacer una plantilla nueva y repito con un presupuesto de cero euros. Todos están aquí porque quieren subir al primer equipo y hacerse un hueco en el mundo del fútbol.

¿Y cómo consideras los resultados hasta la fecha?

Muy buenos. Por los entrenamientos del primer equipo han pasado todos los jugadores, algo que agradezco al cuerpo técnico porque hacen que los chavales se sientan partícipes de este proyecto, han ido convocado cinco (Pedro, Benja, Siro, Salinas y Baldo) y todos menos Pedro han debutado. Para mi hemos conseguido de sobra el objetivo que me plantearon a principio de temporada.

Los primeros que hablan de ascenso son tus jugadores, ¿te gusta que sean tan exigentes?

Me encanta. Tengo muy buenos jugadores, pero ha faltado plantilla, ha faltado grupo. Muchos llegan el jueves con el filial a entrenar y es muy difícil acoplarlo todo. Y si a eso le sumas las lesiones, es más complicado todavía. Jugador por jugador tengo un equipazo, pero me falta plantilla. Falta que esos chavales que vienen de entrenar con el primer equipo y vienen a Divina Pastora a entrenar o se enfrentan a cualquier equipo de preferente les cuesta, pero tienen que adaptarse. Mira Mayoral, el jugador del Castilla, le costaba mucho jugar con el filial del Madrid después de entrenar con los grandes, pero ahora se está saliendo. Yo pido a mis jugadores que luchen desde abajo, que si lo hacen bien desde el primer equipo le van a abrir las puertas, y eso es algo que agradezco al club porque me está ayudando mucho.

Y los equipos rivales, ¿qué opinan de vosotros?

Que tenemos mucho mérito, porque en esta categoría nadie juega al toque, van al choque, nosotros no. Queremos hacer un buen fútbol, y jugar en preferente así es complicado. La última vez que el Hércules jugó el play-off de ascenso frente al Ilicitano muchos eran mayores de 23 años, y lo acabaron perdiendo. Y ahora, por filosofía del club, todos deben ser menores de 23, e incluso tengo a algún juvenil. Así que, si, opino lo mismo, tenemos un mérito tremendo.

Este año parece que también al Promesas le ha mirado un tuerto, como dice Dani Barroso.

La verdad es que si. Moha tuvo que marcharse, Piera cuando empezó a coger confianza se lesionó. Benja se lesionó con el primer equipo y hace poco no pudimos cerrar a un jugador por motivos familiares, pero hemos tenido un problema muy importante durante toda la temporada con la delantera. Nuestro máximo goleador es Carlos con cuatro goles, y es un mediocentro defensivo, con eso te digo todo.

¿Cómo esperas acabar la temporada?

Estoy contento conforme está ahora el equipo, se han acoplado a campos muy complicados como el de Rafal que es muy pequeño. Son muy buenos chicos, muy amigos, pero les falta ese punto de picardía que hace falta en esta categoría. No quiero ponerme objetivos porque cada vez que hemos puesto objetivos los chicos han notado la presión y quiero liberarles, quiero que disfruten de lo que queda de temporada y ponerle las cosas complicadas a la secretaría técnica.

Hablas mucho del año que viene, ¿te ves en el club?

No lo sé, pero te puedo asegurar que todo lo que trabaje lo voy a dejar para el club. Lo he hecho en todos los equipos en los que he estado. Voy a intentar convencer a los jugadores para que se queden porque si esta plantilla sigue igual, el año que viene podemos hablar de ascenso.

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