Un gol de Chechu, tras una gran asistencia de Carlos Martínez, consolida al Hércules en el liderato. El equipo de Lluis Planagumà supo competir y aprovechó la calidad de sus delanteros. El Hércules pudo sentenciar con dos opciones claras de Chechu y Carlos. También Falcón volvió a ser protagonista con varias paradas de mérito.
El Hércules logró ante el CD Ebro su cuarta victoria consecutiva que le consolida como líder del grupo. El equipo alicantino rompe récords, hace historia y se sitúa como el único conjunto que logra el pleno de triunfos en toda la Segunda División B. El Hércules supo adaptarse al terreno de juego de hierba artificial y se comportó como un equipo serio y sólido, sin apenas conceder nada a su rival.
Lluis Planagumà realizó dos cambios respecto al último once. Dio entrada a Adrián por Nani en el lateral izquierdo y a José Fran por Juli. El Hércules tuvo claro el tipo de partido que le convenía y lo interpretó a la perfección. Esperó sus oportunidades y aprovechó su calidad en la delantera para hacerse con una importante victoria. El gol llegó en la primera parte gracias a una combinación entre Carlos Martínez y Chechu. Corría el minuto 25 cuando Carlos ganó y bajó un balón en la frontal para habilitar a Chechu, quien se acomodó la pelota y batió a Salva en carrera. Un gol de calidad tanto en la asistencia como en la ejecución.
El Hércules pudo sentenciar con un remate de cabeza de Samuel, pero sobre todo con otro gran contragolpe que salvó el Ebro bajo palos. Pol Roigé habilitó a Chechu tras una gran conducción. El remate del capitán herculano salió cruzado y cuando estaba preparado Carlos para empujarlo a la red lo salvó el defensa sobre la misma línea de gol. También el Ebro tuvo sus ocasiones y apareció Falcón para desbaratarlas. En especial, una contra de Raúl que paró Falcón con el pie tras aguantar firme en su portería. Otra gran actuación del portero del Hércules, seguro en las salidas y firme bajo palos. Dio la seguridad que necesitaba el equipo en los momentos difíciles.
En la segunda parte, el Hércules volvió a tener sus oportunidades y Carlos Martínez estrelló la pelota en el larguero por dos veces. La primera con un remate de cabeza y la segunda con un golpeo desde la frontal. Faltó el premio del gol a Carlos tras su sobresaliente partido. El Hércules trabajo sin descanso y frenó bien las embestidas del Ebro. Fue solvente en defensa y supo cerrar la cuarta victoria consecutiva.
La victoria deja al equipo líder en solitario. Mención especial a la ayuda que tuvo la escuadra de Planagumà desde la grada. Cerca de cien herculanos se desplazaron para ver al equipo y ayudaron también a la victoria. Que no pare la racha. Ahora a centrarse en el próximo reto, el partido ante el Teruel del próximo domingo a las 19,00 horas en el estadio Rico Pérez.