El presidente del Hércules, Juan Carlos Ramírez, explica públicamente la oferta presentada ante Hacienda para estabilizar económicamente la institución. “Si no se acepta la oferta dimitiré y la empresa entrará en liquidación porque no puedo hacer más. Tengo la conciencia tranquila”, aseguró el presidente herculano quien se comprometió a invertir un millón y medio de euros “para construir un equipo competitivo que nos devuelva a la LFP”.
“Quiero ser honesto primero con la afición, con la ciudad y con todos los que queremos al Hércules. No puedo hacer más. Puedo poner dos millones de euros mañana mismo a Hacienda, ofrezco garantías reales por el resto de la deuda y en el reconvenio que se contemple la multa de Bruselas si nos llega. Es la oferta que presentamos. Además, me comprometo a aportar un millón y medio de euros vía ampliación de capital para hacer un equipo competitivo y lograr ascender y, una vez que estemos en la Liga de Fútbol Profesional, poder pagar a todo el mundo. Si no se acepta la propuesta no va a cobrar nadie y nos quedaremos sin una institución de cien años de historia. Me fastidiaría ser el presidente más breve, pero lo he intentado y tengo la conciencia tranquila. Si no se acepta el plan, dimitiré y que los accionistas decidan qué hacer con la institución”.
Así de contundente y claro se mostró el presidente del Hércules, Juan Carlos Ramírez, ante los medios de comunicación alicantinos al explicar la oferta que ha presentado su consejo de administración a la Agencia Tributaria. El presidente herculano confirmó que el club ha registrado en Hacienda una útima oferta que contempla el pago al contado de dos millones de euros y afrontar el resto del pago de la deuda con garantías hipotecarias sobre bienes urbanos. “Además también existe el problema de la posible multa de Bruselas. Tenemos muchas vías para rebajarla e incluso evitarla porque entendemos que no se acoge a derecho. Pero está ahí y hay que ser previsores. En esta última propuesta incluyo en el reconvenio la multa por si finalmente llega”, explicó Juan Carlos Ramírez. El presidente herculano insistió en que “no voy a prestar mi firma en el escrito que haga el juzgado para la liquidación de esta sociedad. Me merece tanto respeto el Hércules como institución que mi firma no aparecerá en ese escrito. Nos quedaremos sin el club y nadie cobrará nada”.
Ramírez recordó las múltiples negociaciones mantenidas con la Agencia Tributaria para renegociar el convenio: “En Hacienda llevamos más de dos años y medio, desde que el club baja a Segunda B, pagando casi un millón de euros anuales hasta el pasado marzo. Después de muchas reuniones en Madrid se puede decir que los técnicos daban el visto bueno, pero al final lo echaban todo para atrás. Yo respeto mucho a la institución tributaria, pero no se puede decir que el Hércules es moroso porque hasta hace apenas dos meses habíamos cumplido rigurosamente estando en una categoria con ingresos mínimos”.
El presidente del Hércules explicó también cómo están las negociaciones con el Instituto Valenciano de Finanzas para la compra del paquete de acciones: “El IVF está en contacto con nosotros y está realizando una valoración del estado del club para sacar a subasta el paquete de acciones de mas del 70 por cien y después del 15, que se adjudicó a través del paquete que tenía Aligestion. Esperamos que este proceso vaya lo más rápido posible porque tenemos el tiempo muy justo. En torno al 25 de junio tiene que estar este tema solucionado si todo va bien”.
En cuanto al acuerdo con los acreedores, Ramírez reconoció que “tenemos mucho avanzado porque ya teníamos autorizado por la Liga de Fútbol Profesional el reconvenio, aunque todo ha quedado parado por el problema con Hacienda”.
PROPUESTA PRESENTADA POR EL HÉRCULES A LA AGENCIA TRIBUTARIA